
Joven y señorita, alguna vez te has preguntado ¿Qué hago dentro de la Iglesia?,¿Necesitará algo Dios de mí?, ¿Qué tengo yo para ofrecerle a Dios? .
Todas esas interrogantes se hicieron el pasado domingo 9 de julio del presente año, junto a la juventud de Rancagua, en el cual nos encontrábamos en la amada Iglesia de Rosario, realizando un servicio en gratitud a él.
Servicio dirigido por nuestro hermano Luis Valenzuela, quien tuvo la bendición de ser el encargado del devocional.
Nuestro hermano David Araneda fue el encargado de la lectura y exhortación de la palabra, encontrada en San mateo capítulo 5, versículos del 1 al 6 «El sermón del monte: Las bienaventuranzas», donde Dios nos dijo que lo único que necesita de nosotros es un corazón contrito y humillado.
Joven y Señorita POR GRACIAS SOIS SALVOS es un regalo no merecido, pero el señor nos recalcó que si tenemos un corazón conforme a él, cuando se nos presente la dificultad o la prueba seremos más que vencedores.
Fue así como nos gozamos grandemente con la visita de su presencia llenando nuestras vidas de alegría.
Al finalizar nuestro hermano Manuel de la Iglesia de Rosario tuvo una oportunidad, en la cual nos contó de como el conoció al señor, siendo de mucha bendición, ya culminando el servicio el hermano Juan Pablo Méndez jefe de la juventud nos despidió con la bendición.
Ahora ¿Qué estamos esperando para hacer la voluntad de Dios? Juventud «Mira que te mandó que te esfuerces y seas valiente; no temas no desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas» Amén.